La Reapertura de la Plaza México llevó como protagonista al novillero Miguel Aguilar que cortó dos orejas para salir a hombros y abrir la Puerta del Encierro en tarde donde la entrega de los actuantes fue determinante.
El valor y pundonor también lo han puesto esta tarde los novilleros Eduardo Neyra y Alejandro Adame, cada uno cortando una oreja de peso. Importante entrada se reflejó este domingo en los tendidos de la La México.
El abre plaza llevó por nombre “Chilo”, de 459 kilos, del hierro de San Diego de los Padres, que correspondió a Miguel Aguilar que con suavidad manejó el capote para recrearse con lances a la verónica, destacando también en el temerario quite por gaoneras que ejecutó y que desgranó los olés en los tendidos. El brindis al respetable y en los primeros pases buscando las opciones ante el de San Diego de los Padres que tuvo poca fuerza y que además se quedaba corto.
El esfuerzo fue claro y contundente por parte del novillero hidrocálido que desafortunadamente poco pudo hacer. La afición ha sabido reconocerle su deseo y ánimo por agradar, toreó en las cercanías, se arrimó, mostrándose poderoso, bien con los pases en redondo y mejor aún con las ajustadas bernardinas con las que cerró su faena. Gran estocada de Aguilar que derivó en el corte de una oreja.
“Chicharito”, de 468 kilos, segundo de la tarde para el novillero oriundo de Durango, Eduardo Neyra, quien mostró sus cartas credenciales con la variedad impresa en el saludo y en el quite con el capote. Neyra también sorteó con un novillo deslucido que a cuenta gotas embistió, los muletazos que ha podido arrancar tuvieron la calidad, pero sólo fueron pasajes aislados sin encontrar la ligazón. Silencio al final de su actuación.
“Chacho”, tercero del festejo, tocando en turno a Alejandro Adame, quien se mantuvo en todo momento en el ánimo de agradar ante un imposible novillo de San Diego de los Padres. Adame estuvo esforzado y sacando los recursos necesarios para extraer muletazos de valía. El novillo no regalaba nada dentro de su complejidad, pero ha sabido Adame estar ahí, al final, manoletinas y media estocada, y un golpe de descabello para ser aplaudido.
“Chicote”, de 445 kilos, ha permitido a Miguel Aguilar la expresión natural de su toreo. Vibrante comienzo de faena rodillas sobre la arena para ligar tres buenos muletazos. A más fue su faena cuando ligó dos buenas series por el derecho, apostando a torearlo también por el izquierdo donde cuajó también trazos de mucha calidad, aunque el novillo tuvo menos recorrido. Al final, se quitó dos cornadas, pues el novillo ya se vencía y se colaba con peligro. Aun así, se mantuvo firme, siempre dando el paso adelante, mostrando así su gran valor y pundonor. Mató de gran estocada y cortó una oreja.
“Chaparrito”, quinto de la tarde y segundo del lote de Eduardo Neyra, tampoco ofreció opciones, novillo deslucido y falto de fuerza con el que buscó estar con capote y muleta, desde que recibió a porta gayola hasta su comienzo de faena de rodillas. Oreja
“Chamaco”, sexto de la tarde con el queme se abrió con larga cambiada de rodillas, luciendo después en un quite con solera por navarras. En su labor muleteril la apuesta fue clara ante un ejemplar que no resultó fácil, fue prendido sin consecuencias y sin mirarse la ropa regresó a la escena ante el cobijo de la afición que se le entregó. Estocada certera para cortar una oreja.
Ficha: Segundo Festejo de la temporada de “La Reapertura” en La México. Tarde fresca en la que se lidiaron novillos de San Diego de los Padres, bien presentados y de juego variado.
Miguel Aguilar, oreja y oreja;
Eduardo Neyra, silencio y oreja
Alejandro Adame, silencio tras aviso y oreja