Jose Mari Manzanares

Pablo Aguado ha resultado triunfador en la primera cita de San Miguel al cortar una oreja tras una bella faena al tercero de la tarde. Fue el único triunfo de una tarde que se vivió con gran ambiente en los tendidos -se colgó el cartel de ho hay billetes- y en la que hubo momentos de gran interés, como el gran toreo de capa de Morante de la Puebla en el primero de su lote, la faena de Manzanares al segundo y detalles de torería a cargo de Aguado en sus dos toros.

Morante de La Puebla fue recibido con una cerrada ovación en recuerdo de su histórico triunfo de abril. El de La Puebla la compartió con sus compañeros de cartel y cuando salió su toro hizo un monumento a la verónica en un recibo dividido en dos partes porque el toro manseó y se fue suelto. Morante se meció con su sello personal y cerró con dos medidas excelentes. Comenzó la faena con bellos estatuarios y cuando intentó el toreo en redondo le molestó el viento. Esta circunstancia y la falta de motor del toro marcaron en negativo la faena. Morante tuvo que abreviar.

El cuarto llegó bastante apagado a la muleta y Morante lo intentó y pudo dibujar algún muletazo con la derecha pero el toro apenas duró un par de tandas. El de La Puebla puso de su parte hasta que el animal se agotó por completo. El público valoró su esfuerzo.

Manzanares firmó un precioso comienzo de faena en el segundo de la tarde con la rodilla flexionada en el que sobresalió un largo cambio de mano. La primera serie con la derecha tuvo muletazos largos y ligó con temple, igual que en la segunda. La tercera brilló en el cambio de mano y el pase de pecho. Al natural no hubo tanto ajuste y volvió a la derecha para subir el tono gracias a la excelente embestida del toro de Hnos. García Jimenez, que fue fuertemente ovacionado en el arrastre. Perdió un posible triunfo con la espada.

El segundo del lote de Manzanares tuvo buen son en los primeros tercios y el alicantino supo dejar la muleta puesta en las primeras series para ligar. Aunque lo intentó, la faena no pudo romper debido a la limitación del toro. Escuchó palmas.

Pablo Aguado toreó con soltura de capa al tercero, que no humilló de salida. Aguado le hizo un precioso quite por chicuelinas de gran sevillanía y otro a la verónica. El inicio de faena fue de gran belleza, acariciando la embestida del toro en trincherazos y un precioso cambio de mano. Las series diestras que siguieron tuvieron cadencia y compostura, componiendo una faena de delicadeza y naturalidad. Por el lado izquierdo le costó más al toro embestir y a pesar de ello Aguado también compuso buenos momentos. Mató de estocada trasera que hizo efecto y cortó la primera oreja de la tarde.

El sexto estuvo justo de fuerza y fue protestado en los primeros tercios. Aguado lo intentó por el lado derecho y estuvo aseado, sin poder hacer mucho más por el limitado poder del toro, que tendía a defenderse. No hubo opción para redondear el triunfo.

FICHA:

Se lidiaron tres toros de Hnos. García Jiménez -los tres primeros- y Olga Jiménez, bien presentados. Destacaron segundo y tercero.

Morante de la Puebla, silencio y silencio.
Jose Mari Manzanares, ovación y palmas.
Pablo Aguado, oreja y silencio.

Lleno de no hay billetes.