El diestro peruano Andrés Roca Rey, que cortó un total de cuatro orejas y un rabo, fue el máximo triunfador de la corrida celebrada hoy en Cehegín (Murcia), y en la que José María Manzanares también salió a hombros tras pasear el doble trofeo de sus dos oponentes.
Roca Rey fue la sensación de la tarde. En el tercero se lució con dos quites excepcionales, el primero por chicuelinas y el segundo alternando esta misma suerte con tafalleras, para rematar con una larga cordobesa muy pinturera.
La faena de muleta la inició con siete pases por alto sin enmendarse para seguir luego con muletazos sobre ambas manos en lo que fue una faena de gran lucimiento, rematada con unas ajustadísimas manoletinas. Dos orejas para él.
En el último de la tarde, que al final ha sido el más completo, el peruano no las tenía todas consigo por el escaso recorrido del astado. Sin embargo, Roca, a base de pegarse el arrimón y de lidiarlo con mucha entrega y conocimiento, lo acabó embarcando hasta completar una faena de gran brillantez en lo fundamental y lo accesorio.
Roca Rey aguantó estoico los parones del astado en las postrimerías de la faena, lo que acabó por hacer estremecer a unos tendidos que, puestos en pie, le premiaron con los máximos trofeos a gritos de «Torero, torero».
El otro triunfador de la tarde fue Manzanares, que llevó a cabo dos grandes faenas, ambas de menos a más a medida que fue confiándose el alicantino para acabar toreando con primor, relajo, largura, temple y suma estética. Dos grandes estocadas le valió para pasear el doble trofeo de cada uno de sus oponentes.
Morante lució en un quite por delantales en su primero, al que luego toreó con temple, a media altura y siempre muy en corto. Cortó una oreja. El cuarto no le dio opción por su falta de fuerzas, y el espada se limitó a dibujar algunos detalles de su toreo artístico. Pudo haber tocado pelo de no ser por su mala espada, conformándose finalmente con una ovación cariñosa del respetable.
FICHA DEL FESTEJO
Toros de Núñez del Cuvillo, el primero como sobrero, correctos de presentación, bravos y nobles, a excepción del cuarto. Destacó el último, aplaudido en el arrastre.
- Morante de la Puebla, oreja y ovación tras aviso.
- José María Manzanares, dos orejas y dos orejas.
- Roca Rey, dos orejas tras aviso, y dos orejas y rabo.
La plaza registró un lleno aparente