Por María José Mora
Los tentaderos son faenas vitales de la cabaña brava , se trata de pruebas de selección genética en donde cada ganadero según una serie de criterios personales , tradicionales y generacionales , minuciosa y cuidadosamente va probando a las reses y dejando para procrear las que elige procurando el futuro de la ganadería.
Además son citas esenciales e ineludibles para los toreros ya que son entrenamientos importantes de preparación de cara a enfrentar la venidera temporada taurina.
Para los ganaderos es importante que con buen oficio saquen el mayor partido durante esta prueba a las reses tentadas como también lo es la sabía experiencia del picador y que además sepan interpretar en todo momento esos parámetros en los que cada uno mueve ficha.
Son sin duda alguna y por supuesto también oportunidades para los que recién empiezan su caminar en esta andadura para coger sitio , practicar la técnica , expresarse y aprender de los maestros.
El pasado viernes 15 de Marzo en la ganadería Osborne «Dehesa Puerto Acebuche» compartieron tentadero el matador de toros Ginés Marín y el joven novillero sin picadores de la localidad Sevillana de Los Palacios y Villafranca Manuel Troncoso.
Es crucial para el porvenir de la Tauromaquia que los ganaderos abran las puertas de su casa a la nueva generación , esa que necesita torear , que precisa mucho contacto con el animal bravo y desarrollarse.
Este es por supuesto un modo de proyectar esa continuidad y de reforzar el presente.
Bonita tarde en la que ambos , matador de toros y novillero pudieron aprovechar y nutrirse del toreo a la sombra de un plaza de tientas en mitad de la belleza del campo bravo.
Fotos: María José Mora
