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Javier Conde se plantea hacer temporada en 2018

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Javier Conde » Nací para ser torero y estoy para torear mañana mismo… es mi vida, es mi necesidad, mis amigos son a través de la tauromaquia»

Javier Conde atiende a los compañeros de La divisa, además de hacer balance de la corrida Crisol que se celebro el 17 de agosto en la malagueta, tanto Conde como Ponce ya están buscando donde hacer la segunda edición de este espectáculo único.

Javier Conde hablo de su planteamiento para el 2018 «Me fui con el maestro Ponce a Ecuador y a México y acabé toreando un festival con él en Quito, otro en México y nosotros hacemos absoluta temporada de preparación conjunta. Es un mano a mano diario. Estar al lado de semejante triunfador que no se deja ganar la pelea ni en un tentadero es un reto continuo. Para mí es un privilegio. Lo único que hice ese día es torear como me encuentro a diario. En determinados momentos estoy consiguiendo tanto en el silencio del campo como en la plaza torear toros como creo que no he toreado nunca y como creo que llevaba en mi alma. Por supuesto que me apetece torear. Ya me han hablado de cosas y hay movimiento. A mí me apetece muchísimo.»

«Me encuentro con la necesidad de expresar como me veo. Veo que disfrutan los compañeros muchísimo. En América hemos toreado casi todos los días en el campo. A mí me apetece torear, pero es la vida la que me tiene que dar esa oportunidad. Vivo como nací. Nací para ser torero y estoy para torear mañana mismo… es mi vida, es mi necesidad, mis amigos son a través de la tauromaquia. Mi caminar y mi disfrute es ese y mi corazón es toreo.»

Habló de su ofertas de apoderamiento «En estos días voy a decidir algo. Voy a tener una persona cerca para que trabaje, se ilusione conmigo y estemos juntos. La mayor de las ambiciones es torear. Es una etapa bonita. Me he llenado de orgullo estos días porque no había personaje que no me preguntara por mi padre, tú sabes lo que ha luchado a mi lado como torero y la cantidad de amigos que ha hecho en esto. Ahora no tiene tantas ganas de guerra pero qué bonito que yo viaje por el mundo y se acuerden de él. Nosotros, como estamos encerrados en la habitación el día de la corrida, te pierdes muchísimas cosas que ahora estoy recordando. Me doy cuenta del trabajo tan grandioso que ha hecho.»

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