Gran dimensión de Rafael González con tres orejas. Francisco De Manuel cuajó otra gran actuación en el quinto novillo. Mientras Antonio Grande arrancó una oreja del primero.
EL PARRALEJO | Rafael González – Francisco de Manuel – Antonio Grande Plaza de toros de Guadarrama, 29 de Septiembre de 2019. Primer festejo de Feria. Media plaza en tarde calurosa. Seis novillos de El Parralejo bien presentados, nobles en general y de juego desigual. Rafael González (oreja y dos orejas) Francisco de Manuel (ovación y dos orejas) Antonio Grande (oreja y ovación) |
Arrancó la Feria de Guadarrama con la temperatura más propia del mes de julio que de finales de Septiembre. En el primer festejo celebrado, se reseñó una novillada fuerte, seria y de diferentes hechuras y comportamientos.
El primero del lote de Rafael González, fue un novillo mansote, marcó la querencia a chiqueros desde los primeros lances del capote. No sé empleó nada en los vuelos del capote durante la lidia ni en la suerte de varas. Ya con la muleta, Rafael comenzó a pies juntos pasándose el novillo muy cerca. Diseño una faena a base de paciencia, sin apretar al animal con muletazos dejando la tela muy en la cara, sin perder pasos y siempre luchando para que no se fuera a terrenos de chiqueros. Buena actitud del torero que mató de una estocada de libro, fulminante de la que solamente la forma en la que se tiró valía por si sola el premio de una oreja.
Con el cuarto de la tarde, animal que salió con más pies que sus hermanos anteriores no rompió con el capote. Después de cumplir con el caballo, destacó la buena lidia de José Luís Triviño en banderillas. Ya con la muleta, Rafael comenzó de rodillas, toreando de forma muy templada y marcándole siempre las embestidas al animal. La faena tuvo dos fases. Una primera donde después de verse la calidad del novillo, Rafael trató de afianzarlo en las primeras tandas con un toreo más técnico a base de consentir al animal, llevarlo largo en los vuelos de la muleta y siempre sin apretarle para que no se viniera abajo. Y otra más técnica, con el fondo de nobleza y calidad en sus embestidas, permitió que González dibujara muletazos de trazo largo por abajo en ambos pitones. Estuvo a gusto Rafael. Gran novillo que tuvo mucho fondo y duración, fué premiado con la vuelta al ruedo, después de cortarle las dos orejas.
El segundo de la tarde, resultó ser un novillo manso donde Francisco de Manuel, cuajó un bello inicio con el toreo de capote. En el caballo arreó como manso que era y rápido se le vió las intenciones que traía al acostarse en varios lances con el capote de Juan Carlos Rey durante la lidia en banderillas. Con la muleta, De Manuel trató de robarle los muletazos a un animal mansó e incierto, donde la mayoría de las embestidas que marcaba lo hacía siempre con la cara por las nubes y en ocasiones con peligro acostándose en las embestidas por los adentros del torero. Estuvo firme Francisco, donde a base de consentir y tragar al animal resultó cogido sin consecuencias. Mató de estocada entera.
El quinto de la tarde de Francisco resultó ser un precioso novillo castaño, serio y bien hecho. Destacaron la buena lidia de Raúl Ruiz Bonilla y los pares de banderillas de Juan Carlos Rey. Con la muleta, el novillo fué de más a menos. Se empleó y entregó a fondo en las embestidas de las primeras tandas de la faena. Tuvo mucha transmisión, queriendo coger los engaños por abajo junto con una calidad extraordinaria tanto de principio a fin. Francisco estuvo muy firme para en un primer momento domar las embestidas que tenía el animal y una segunda fase de la faena, donde demostró gran concepto templado, vertical y ligado, con bellos remates de pecho. Mató de pinchazo y estocada y fué concedida dos orejas.
Antonio Grande sorteó un primer novillo feote, alto de agujas y con hechuras totalmente diferentes a sus hermanos lidiados. Manseó en los primeros lances con el capote siempre queríendo irse a terrenos de toriles, así como en el encuentro con el picador. Ya con la muleta, Antonio se dió cuenta rápido de que los pocos muletazos que tenía el animal serían en zona de tablas, a base de «atacarle» al animal y no dejarle pensar. Demostró gran actitud frente a un novillo que no ofreció embestida clara. Premio de oreja al tesón del salmantino.
Con el sexto del encierro, un bello jabonero sucio, resultó ser otro buen novillo. Con menos fondo que el anterior lidiado, resultó ser buen colaborador. Ya en banderillas, lidió de forma magistral Roberto Martín «Jarocho», llevándole largo y embebido en los vuelos del capote. Con la muleta, Antonio cuajo buenas tandas por ambos pitones. Con un novillo a menos y con el límite de fuerzas muy marcadas, trazó buenos muletazos pero sin llegar a calar en el público.
NOTA: Destacó la buena lidia al sexto novillo de Roberto Martín «Jarocho», así como los pares de Juan Carlos Rey al quinto novillo de la tarde. Vuelta al ruedo al cuarto novillo de la tarde nº 41