El pasado sábado se cumplían 15 años de alternativa de uno de los nombres importantes que Albacete ha dado al toreo.
Andrés de nombre, Palacios de apellido, lleva ese drama implícito en una persona en la que a pesar de no torear todo lo que debiera, sigue teniendo la afición y la ilusión intacta que le hace levantarse cada día para ir a entrenar como el que tiene firmadas 60 tardes.
Injusticias del sistema taurino, con tardes rotundas como aquella oreja de un toro de José Luís Pereda en Madrid de hace casi 10 años en la que pudieron ser dos de no haber sido por el fallo con la espada, y no volver a pisar la plaza como si de un castigo divino se tratara… O la tarde en Albacete de 2017 frente a una seria corrida de La Quinta en la que volvió a demostrar la dimensión de torero que atesora, sin más repercusión que volver a la situación en la que se encontraba días antes.
Hemos querido charlar con Andrés Palacios para poder conocer un poco más que nos cuente de como afronta su día a día.
Después de 15 años de alternativa. ¿Cómo afrontas tu carrera de cara a los próximos años?
Han sido muchos años sin torear, largo en el tiempo pero corto en festejos. Los años que vengan por delante que sean igual que esos 15, siempre con la ilusión de torear, al final es parte de la vida de los que sentimos el toreo. Estamos en un momento de incertidumbre, pero lo que tengo claro es que voy a disfrutar cada animal que toree, sintiendo lo que hago.
¿»La Chata» puede ser la plaza de mayor responsabilidad para Andrés?
Para mí la plaza de Albacete no es la plaza de más responsabilidad. Es donde más agusto hago el paseíllo, donde realizo el toreo que me llena, y donde siento que el aficionado me está esperando. La responsabilidad llega en plazas grandes como Madrid, en Albacete por el contrario me siento torero.
«…Como no rememos todos a favor nosotros mismos podemos destruir la tauromaquia. No va hacer falta antitaurinos…»
Siendo un torero de Albacete y no verte anunciado entre años 2010 a 2017, decides marchar a Perú. ¿Cómo te marca aquel país?
Esos años fueron años duros, lo pasas mal. Ves a tus compañeros que están toreando en la Feria y tu no te ves anunciado es difícil. Decidí irme a Perú con todo lo que ello conlleva, los viajes, diferente muy peculiar. Le estoy muy agradecido porque es momento me mantuvo la llama de ilusión por el toreo, quererme vestir de toreo cada tarde. Fue una decisión acertada.
Después de una tarde importante con la de La Quinta en 2017, ¿crees o piensas que a pesar de la injusticia de no volver a Albacete?
De esa tarde de 2017 más que injusticia, yo esperaba que hubiera habido más repercusión. Después de haber estado sin torear tanto tiempo el verte anunciado con esa corrida de Santa Coloma, estar a ese nivel y dar una gran tarde de toros, creo que podía haber sido el momento para haber vuelto a la plaza de Madrid después de la oreja que corté después de tantos años sin volver a Las Ventas. Hay que seguir luchando porque al final en el torero nunca se sabe cuando puede cambiar la moneda.
Ha habido varias personas vinculadas a tu carrera. Miguel Flores, Romero Leal, Javier González y Pablo Saugar «Pirri». Brevemente, que valoración te merecen?
Realmente todos ellos me han aportado cosas positivas y personales a mi carrera. Especialmente el que me coge de novillero sin caballos y me lleva hasta la alternativa, y por su forma de entender el apoderamiento es Miguel Flores. Fue el que más me aportó, aún sin saber si llegaría a matador de toros desde novillero sin caballos, esa lucha, ese cariño es un recuerdo muy bonito. Creo que apoderados como el quedan muy pocos.
A pesar de no haber toreado ningún festejo ¿Cómo te ha influido todo esta crisis sanitaria debido a la pandemia del Covid-19 en tu carrera? ¿Cómo afrontas el día a día ante está situación?
Como a casi todos. Nos ha dejado un poco descolocados, ya que de tener una rutina, unas ilusiones o unos objetivos se ha cortado todo en seco. Ahora tenemos la incertidumbre del año que viene, si se darán toros, como se darán, como estará el toreo en general y ver sobre todo si ha salido afectado como negocio.
Como torero estoy acostumbrado a mucho tiempo sin torear. Lo que hago principalmente es entrenar, ir al campo, intento se mejor al fin y al cabo disfrutar el toreo que es mi gran pasión.
Con los numerosos ataques que está sufriendo la tauromaquia desde diferentes sectores y estamentos públicos ¿Cómo ves el futuro de la tauromaquia a corto-largo plazo?
Lo veo complicado por momentos. Como no pongamos la solución interna de tener unanimidad y estar unidos y evitar tirar cada uno para un lado y sus intereses creados. Como no rememos todos a favor nosotros mismos podemos destruir la tauromaquia, no va hacer falta antitaurinos.