Una oreja para un gran Javier Cortés, un sublime Gómez del Pilar y una mansa corrida de Cebada Gago en Illescas.
Hoy, primero de Septiembre, se presentaba un cartel de un gran interés para los aficionados toristas en Illescas. Una impresionante corrida de Cebada Gago aguardaba en los chiqueros para los diestros: Javier Cortés, que sustituía a Diego San Román, Damián Castaño y Gómez del Pilar.
Abría la tarde un toro de gran presentación pero que no tuvo nada por dentro, fue abanto y manseó mucho.
Javier Cortés estuvo firme con el animal. Consiguió sacar algún muletazo limpio a media altura pero sobre todo dejó detalles de gran torero y de tener una gran afición. Estocada en todo lo alto, que acabó con el animal. Oreja
El segundo de la tarde fue un animal que se fue apagando poco a poco. Durante un capotazo en banderillas hizo el avión como un toro de vacas, pero duró poco. Damián hizo faena al noble animal que poco a poco se fue viniendo a menos. Acabó dejando algún derechazo limpio, pero de excasa hondura.
El fallo con los aceros hizo que perdiera una oreja ganada a base de intentar sacarle al animal lo que no tenía. Palmas.
El tercero de la tarde fue otro bellísimo ejemplar: bajo, largo y cuajado. Noé, toreó a la verónica llevándolo hacia dentro y demostró ser un TORERO estando pendiente y ordenando, a su cuadrilla durante la lidia.
Comenzó la faena por el lado derecho y, tras dos series de gran emoción, en las que tragó mucho al animal, se rajó descaradamente hacia las tablas, lo que hizo que tuviera que coger los aceros y acabar con el toro.
Tras fallar con los aceros, escuchó un aviso y recibió una ovación desde los tendidos.
Pasado el ecuador del festejo, salió un castaño claro, algo diferente al resto de sus hermanos, pero que por dentro tuvo lo mismo.
Javier Cortés dejó un inicio de faena sublime, de toreo clásico, exigiendo una embestida por abajo y con un embroque de lo mas ajustado y de verdad. Pero las caídas y la embestida descompuesta del animal, fueron haciendo estragos y el diestro, tuvo que terminar con el toro de una estocada defectuosa.
El público, supo valorar las ganas y torería de Javier y escuchó una calurosa ovación tras el arrastre del animal.
Salía el quinto de la tarde y viendo la tendencia de la tarde, nos acordamos y anhelábamos el extraordinario toro de la pasada «Feria del Toro» de Pamplona.
El animal tuvo unas hechuras preciosas. En los lances de capa fue exigente y con movilidad aunque quedándose algo tobillero.
Montera calada, inició Damián la faena dejando algunos derechazos y naturales buenos. EL punto cumbre de la misma, fue cuando se puso a pies juntos, dando el pecho al animal y con la mano izquierda le dio dos naturales de un asentamiento y hondura digno del toreo caro del siglo XX.
Tras fallar con los aceros y escuchar un aviso, acabó la cruceta del verduguillo con el animal, y recibió una ovación que saludó desde el burladero de matadores.
Para cerrar la tarde salió un toro de los que da miedo. De rodillas en el tercio recibió al sexto Gómez del Pilar y lo paró a la verónica en una auténtica pelea con la fiera, que puso en pie a toda la plaza.
Con la diestra y de rodillas inició la faena con un a gran altura. El toro fue desarrollando nobleza y acabó descolgando la cabeza algo mas que sus hermanos. Tuvo el animal, el defecto de pararse a mitad de embroque y eso hizo tragar mucho a Noé.
Acabó con un arrimón y pudiendo por completo al toro. Falló con los aceros y lo mató tras escuchar el aviso. Palmas
NOTA DE LA TARDE
Toros de Cebada Gago de gran presencia y poco juego para:
Javier Cortés: Oreja y ovación
Damián Castaño: palmas y palmas
Gómez del Pilar: saludo y palmas
Entrada: 1/3 de plaza
FOTOS: Juan Pablo Cardona
