¿De que ética me hablan?
Los antitaurinos, y animalistas en general, suelen argumentar que las corridas de toros no son éticas, lo que por sí solo demuestra la supina ignorancia de estos colectivos, afortunadamente muy minoritarios, aunque muy ruidosos, por montaraces.
Vamos a intentar aclarar el tema, a un nivel elemental, para que lo puedan entender incluso ellos.
La Ética es una rama de la Filosofía que se ocupa de estudiar, analizar, los actos de los seres humanos, así como las relaciones interpersonales (no entre los seres humanos y los animales irracionales, o las cosas), para dictaminar si son buenos o malos, morales o inmorales. Por ello Humberto Eco, afirma acertadamente, que la Ética empieza cuando aparece «el otro»(las demás personas) y es necesario establecer unas relaciones de respeto entre las personas, base de la Ética Natural Aquello que se considera bueno, correcto, forma lo que llamamos Moral, que son unas normas recomendadas y de obligado cumplimiento.
Pero no solo hay una Ética (Moral). A modo de ejemplo digamos que para Sócrates la razón nos dictará lo que es ético; Kant entiende que una cosa es Ética si se hace con buena voluntad; Para David Hume la Ética viene determinada por los sentimiento; Tomas de Aquino opina que algo es ético o no según las obligaciones y conciencia de la persona; Baruch Spinoza entiende que todo aquello que sirva para el mejor conocimiento del ser humano es ético(moral); Para Ortega y Gasset la Ética viene determinada por las circunstancias del momento y de la persona.
Así podríamos seguir citando grandes filósofos y viendo como su forma de entender la Ética es diferente.
Por ello hemos de admitir que los animalistas digan que las corridas de toros no son éticas, pero inmediatamente tenemos que preguntarles, ¿de qué Ética hablan? puesto que, ya quedó claro como, la Ética se refiere a las relaciones entre persona y no con animales irracionales y, por otra parte, cada uno interpreta la Ética a su manera, siempre bajo un principio fundamental cual es el respeto y reconocimiento mutuo, cosa que ellos no hacen.
Queda patente su ignorancia de base en este tema. Aun así podemos respetarles siempre que ellos nos respeten a los demás, cosa que nunca hacen.
Pero es que hemos de tener en cuentan otros conceptos, que pasamos a relatar:
a) Partimos de la base de que los animales irracionales están en el mundo para que el ser humano los utilice como convenga en cada momento, siempre que les respete, pues en el Génesis se dice : «Hagamos el hombre a nuestra imagen y semejanza, que domine los peces del mar, las aves el cielo, los ganados y reptiles de la tierra. Y así fue»
b)Los animales irracionales no pueden tener derechos porque no podemos pedirles deberes, ya que son conceptos que ellos no pueden entender, pero los humanos si tenemos el deber de respetarles, de alimentarle y no maltratarles. Lo que se hace en una corrida de toros no es maltrato, ya que es algo reglado por la ley y todo ello tiene su fundamento. El toro es un animal diseñado para soportar toda la lidia perfectamente, dado su carácter de bravo y su sistema neuroendocrino. Y sobre todo si no se hicieran corridas de toros el toro desaparecería. Los animalista otorgan derechos humanos a los animales y este es otro craso error, que pone en evidencia su ignorancia.
c)En la vida cada ser tenemos nuestra función que cumplir para bien y para mal, y sacar las cosas de su lugar, querer cambiar la naturaleza, la Biología es de mentes trastornadas y siempre conducirá al desastre.
Por todo ello las corridas de toros son totalmente éticas (morales).
Los animalistas hablan, opinan y pontifican desde una total ignorancia y con una mente profundamente trastornada. Tan es así que en reciente entrevista publicad en el nº 2079 de Aplausos, el catedrático de Ética, don Fernando Savater, afirma contundentemente que los animalistas son unos maniacos.
No sé exactamente si su trastorno mental se puede calificar como «manía», pero sí creo conveniente citar los estudios llevados a cabo por el doctor Johannes Michalak y colaboradores, en la Universidad de Hildesheim (Alemania), publicados en la revista «International Journal of Behavioral Nutrition and Physical activity», el año 2012, número 9, en el que demuestra como los vegetarianos (la inmensa mayoría de los antitaurinos, y animalistas en general son veganos-vegetarianos) tienen, de forma significativa, más trastornos mentales ( depresión, ansiedad y síntomas somáticos, como dolor, por somatización de alteraciones mentales, pues la alteración mental la localizan en alguna parte del organismo como cabeza, estomago, vientre etc.). Pero el estudio demuestra que dichos trastornos no se pueden explicar solo por la falta de nutrientes causada por la dieta vegetariana, lo que les lleva concluir que estas personas ya tienen originariamente, constitucionalmente, los trastornos mentales, que a su vez les inclinan a hacerse vegetarianos. Es decir que los trastornos mentales que exhiben, no solo pueden ser consecuencia de su veganismo sino que además, y lo que es más importante, son causa.
En la primera mitad del siglo XX, una escritora de origen danés, pero residente en Noruega, llamada Sigrid Undset, dijo que, «algunos aman las flores y los animales porque son incapaces de entenderse con sus semejantes». Tal vez los animalistas activistas, radicales, violentos, veganos, tengan dificultad para relacionarse con sus semejantes debido a los trastornos mentales que hemos descrito.
Por lo pronto sabemos que son muy violentos y por tanto son peligrosos para la sociedad en general.
Rafael Comino Delgado