Logroño 2017

Bautista y Victorino ponen el broche de oro a la feria de Logroño

Juan Bautista, con un total de tres orejas, salió hoy a hombros junto al Victorino Martín y el mayoral de su ganadería al término del último festejo de Logroño, una tarde rotunda del francés y de los toros del hierro de la «A Coronada», con uno de ellos, «Verdadero», premiado con la vuelta al ruedo.

FICHA DEL FESTEJO. Toros de Victorino Martín, bien presentados, bravos, con clase y de excelente comportamiento. Una gran corrida de toros. Destacó sobremanera el segundo, de nombre «Verdadero», número 90, negro bragado entrepelado de capa y de 517 kilos, que fue premiado con la vuelta al ruedo tras denegarle la presidencia el indulto pedido por los tendidos.

Curro Díaz, de grana y oro :estocada ligeramente desprendida (oreja); y estocada trasera y tendido (silencio)

Juan Bautista, caña y oro: de estocada (dos orejas tras dos avisos); y casi entera al encuentro (oreja).

Román, de nazareno y oro: estocada tendida (silencio); y pinchazo, estocada perpendicular y descabello (silencio).

Juan Bautista salió a hombros junto a Victorino Martín y el mayoral de la ganadería.

En cuadrillas, buenos tercios de varas a cargo de Alberto Sandoval y Puchano a segundo y quinto, respectivamente.

La plaza registró media entrada en los tendidos.

Un triunfo ‘Verdadero’

Hubo que esperar a la última de feria para ver, por fin, un espectáculo de primerísimo nivel, y todo gracias a don Victorino Martín, que volvió a protagonizar una tarde grandiosa en el coso de la Ribera con una corrida brava y muy interesante, en la que destacó el toro «Verdadero», para el que se llegó a pedir el indulto, aunque al final fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre.

Y con este ejemplar emergió un Juan Bautista también excepcional. El francés cuajó, posiblemente, una de las faenas más rotundas e importantes de su ya dilatada carrera.

Un elegante toreo a la verónica dio paso a un gran tercio de varas a cargo de Alberto Sandoval. Ahí se vio ya que el toro podía ser de lío gordo. Y vaya si lo fue. Bautista lo toreó a las mil maravillas en una faena de mucha intensidad y ritmo creciente. Las series, siempre a más en número de pases, y los muletazos, muy templados, largos, profundos y por abajo.

Con la plaza convertida en un hervidero llegó el momento en el que francés se descolgó de hombros, se abandonó por completo y empezó a torear con un desmayo y una cadencia extraordinaria. A partir de ahí empezaron a asomar pañuelos blancos en demanda del indulto del incansable, bravo y enclasado «Verdadero».

Sonaron hasta dos avisos entre la incertidumbre de qué iba a pasar. Pero al final no se le perdonó la vida. Fue el propio ganadero, en un gesto que le honra, el que así lo determinó. No le valía para semental, aseguraba, mientras la plaza abroncaba al palco por no asomar su pañuelo naranja.

Bautista tuvo que montar la espada para acabar dejándola en todo lo alto. Hubo muerte de bravo y una tremenda ovación de los tendidos mientras se le daba la vuelta al ruedo. También hubo pasión en la de Bautista con las dos orejas.

Otro apéndice más obtuvo del quinto, toro también excelente, muy humillador y con codicia, al que Bautista, que anduvo muy variado con el percal, volvió a torear de maravilla por el lado derecho a lo largo de una faena perfectamente estructurada y muy bien medida.

Otro que rayó a buen nivel fue Curro Díaz, pero solo con su primero, un toro encastado y con mucha transmisión, al que cuajó sobre ambas manos en una labor sincera, de mucho gusto, pureza y plasticidad en la interpretación. Faena también muy medida y sin alharacas del de Linares, que agarró una buena estocada para lograr así una oreja de peso.

El cuarto fue otro toro con movilidad, pero no sin tanta franqueza como el anterior. Curro Díaz, correcto en los primeros compases, no acabó de cogerle el aire, motivo por el que la labor acabó silenciada.

Román pasó de puntillas en su primero, toro que acometía de largo, con codicia y por abajo, mejor sin cabe por el derecho. De ahí que no se entienda el empecinamiento del valenciano en torearlo al natural. Faena, por tanto, a la deriva y de muy poco contenido. Silencio en filas.

Tampoco aprovechó convenientemente Román al encastado sexto, al que pegó algunos muletazos aislados dentro de otra faena deslavazada

Agencia EFE

Bautista y Victorino ponen el broche de oro a la feria de Logroño Leer más »

Una tarde para olvidar en la quinta de feria en Logroño

Ni una sola oreja, únicamente una ovación con saludos para el mexicano Joselito Adame, ha sido el paupérrimo balance del quinto festejo de la Feria de San Mateo de Logroño, un espectáculo para olvidar cuanto antes, marcado, sobre todo, por el nulo juego de la corrida de Zalduendo.

FICHA DEL FESTEJO.- Seis toros de Zalduendo, el quinto como sobrero, correctos de presentación, muy justos de fuerzas y deslucidos en general.

Joselito Adame, de verde botella y oro: estocada tendida y desprendida (ovación); y estocada trasera, baja y atravesada (silencio).

Juan del Álamo, de azul marino y oro: estocada desprendida (silencio); y pinchazo, bajonazo y descabello (silencio).

Ginés Marín, de rioja y oro: estocada trasera y caída, y descabello (silencio tras aviso); y tres pinchazos y estocada baja (silencio tras aviso).

La plaza registró un cuarto de entrada en los tendidos.

UN «PETARDO» EN TODA REGLA

Un cartel joven y de futuro se anunciaba hoy como el penúltimo de la Feria de San Mateo. Los dos triunfadores de San Isidro, Juan del Álamo y Ginés Marín, junto a la máxima figura mexicana del momento, como es Joselito Adame, que, además, también cortó una oreja el pasado mes de mayo en Madrid.

Alicientes e interés había de sobra, mas pareció no ser suficiente para la afición logroñesa, que cubrió apenas un cuarto del aforo del multiusos coso de La Ribera (unos 2.500 espectadores).

Ese hándicap fue clave para que la faena de Joselito Adame al primero no llegara a calentar lo suficiente el ambiente. Estuvo muy correcto y templado el mexicano ante un toro que se sujetaba con alfileres, muy por encima de las circunstancias. Pero, ya está dicho, la gente no acabó de valorarlo.

En el cuarto ocurrió algo parecido. Buena imagen del mayor de los Adame frente a un toro que se movió más que sus hermanos. Animoso y dispuesto, el hidrocálido (de Aguascalientes) dejó retazos de buen toreo, aunque, al final, lo afeara todo con un espadazo muy defectuoso. Silencio en filas.

Juan del Álamo no tuvo «material» propicio en su primer turno ante un astado muy agarrado al piso, incómodo y deslucido, con el que el salmantino ha estado muy tesonero pero sin encontrar la manera de hacerlo ir hacia adelante, y eso que estuvo largo tiempo intentándolo por uno y otro pitón.

El quinto fue devuelto por inválido y sustituido por un sobrero del mismo hierro, que tampoco se prestó por lo complicado que fue. Fue el típico toro corraleado, siempre al acecho del torero, sin emplearse. Del Álamo volvió a poner voluntad durante la larga faena y de muy poco eco en los tendidos.

Ginés Marín estuvo por encima de la apagada condición de su primero, con el que dejó el sello del empaque y el buen gusto que atesora manejando las telas. Faena técnica e inteligente del gaditano, aunque extremeño de adopción, que aguantó también miradas y parones con notable suficiencia. Faltó contundencia con los aceros y los tendidos, demasiados fríos, ni le ovacionaron.

Y con la tarde ya muy cuesta arriba no mejoró la cosa en el sexto, otro toro flojo y sin recorrido, con el que Marín anduvo esta vez más intermitente, intercalando pasajes de buena firma con otros más lineales y poco ajustados.

Agencia EFE

Una tarde para olvidar en la quinta de feria en Logroño Leer más »

Jugando al toro con Ginés Marín en Logroño

La alcaldesa de Logroño , Cuca Gamarra, ha impuesto a Ginés Marín el pañuelo de las fiestas de San Mateo.

El matador de toros Ginés Marín se ha convertido esta mañana en el protagonista de la actividad JUGANDO AL TORO con GINES MARÍN, organizada por el Ayuntamiento de Logroño.

En el centro de un ruedo fabricado para la ocasión, en el conocido Paseo del Espolón de Logroño, Ginés ha sido recibido por cientos de niños con capotes y muletas que han aprovechado el rato para conocer algunas claves de su tauromaquia, toreando con él de salón.

La alcaldesa de Logroño , Cuca Gamarra, ha impuesto a Ginés Marín el pañuelo de las fiestas de San Mateo.

Presentes en el acto también el concejal de Festejos, Miguel Ángel Sainz y los vendimiadores protagonistas de estas fiestas que incluso se han atrevido a dar unos lances con el capote de Ginés.

Esta tarde, Ginés Marín hará el paseíllo en el coso de la Ribera de Logroño con toros de Zalduendo junto a Joselito Adame y Juan del Álamo, que completan el cartel.

Jugando al toro con Ginés Marín en Logroño Leer más »

Oreja para Urdiales, que pone el argumento a una tarde agria en Logroño

Una oreja de ley a cargo de Diego Urdiales ha sido lo más destacado de la cuarta de la feria de San Mateo de Logroño, una tarde agria y complicada en lo ganadero y en la que tanto Miguel Ángel Perera como Cayetano Rivera se han ido de vacío.

FICHA DEL FESTEJO.- Toros de El Pilar, muy desiguales de presentación, cómodos por delante, y de juego también variado. De menos a más, el primero; agrio e imposible, el segundo; soso, el tercero; bruto y con genio, el cuarto; incierto y complicado, el quinto; y noblote el sexto.

Diego Urdiales, de berenjena y oro: pinchazo y casi entera (ovación tras aviso); y estocada (aviso y oreja con petición de la segunda y bronca al palco por denegarla).

Miguel Ángel Perera, de grana y oro: dos pinchazos, casi entera y tres descabellos (silencio tras aviso); y estocada desprendida y descabello (silencio).

Cayetano Rivera, de turquesa y oro: dos pinchazos, estocada tendida y trasera, y descabello (leves pitos); y estocada trasera y dos descabellos (silencio).

La plaza registró tres cuartos de entrada en los tendidos.

URDIALES, NATURAL(MENTE)

Diego Urdiales dejó pinceladas de su personal toreo en el que abrió plaza, un toro que blandeó de salida, muy protestado por los tendidos, pero al que el presidente mantuvo en el ruedo en un acto de fe que, al final, le salió bien.

Se vino arriba el de El Pilar en la muleta, acometiendo con casta las telas de un entonado Urdiales, que rayó a gran altura con él. Hubo sentimiento, gusto y hasta relajo al natural, y mucho encanto y reunión también por el pitón derecho. Faena a más, como el toro, y en la que el riojano se desenvolvió en muy poco espacio.

Lástima el fallo a espadas. El pinchazo previo a la estocada final le privó de un más que merecido trofeo.

El cuarto fue un toro feo donde los haya: alto, basto, mal hecho, que además siempre marcó la huida, acometiendo a todo lo que se le ponía por delante con mucha brusquedad. El mérito de Urdiales fue la paciencia que tuvo, lo mucho que se metió con él para ir haciéndolo poco a poco y acabar obligándole por abajo en unas preciosas y meritorias serias al natural.

La plaza «rompió» con su paisano, que salió por los aires en un desplante. Se rehizo el hombre y volvió a la carga con más rabia si cabe, algo que convulsionó aún más los tendidos, que se volcaron con él en un fin de obra de mucha emoción.

Le pidieron con fuerza las dos orejas, mas el usía optó por dejar el premio en singular, llevándole la consabida bronca tras el arrastre del astado.

Perera sorteó un primer toro de lo más desagradable e incómodo para estar delante. Un animal agrio, que a media altura protestaba con la cara por las nubes y que a la mínima que se le exigía por abajo perdía también las manos. Fue imposible cualquier intento por parte del extremeño, que pasó también un quinario para montarle la espada.

A pies juntos recibió Perera al quinto, al que inició faena con el clásico cambiado por la espalda. Muy importante fue lo que hizo Perera con un toro complicado, que sabía lo que se dejaba atrás, con mucha guasa, pero al que no volvió la cara para jugársela a carta cabal. La gente lo supo reconocer, aunque su falta de contundencia con los aceros dejó todo en un nuevo silencio.

El primero de Cayetano fue un toro que, sin ser un dechado de virtudes, tampoco tuvo tantos defectos como para la falta de compromiso que tuvo el madrileño con él. Todo fueron series insípidas, para fuera y sin acabar de plantarse en la arena. Faltó convicción y, sobre todo, «alma». La gente se lo reprochó con algunos pitos al concluir su labor.

Tampoco mejoró su imagen con el noblete sexto, al que diseñó una labor tan comunicativa con los tendidos como vulgar y desconfiada en lo artístico.

Agencia EFE

Oreja para Urdiales, que pone el argumento a una tarde agria en Logroño Leer más »

A oreja por coleta en la tercera de feria en Logroño

Una oreja cada uno han cortado los diestros Enrique Ponce, José Garrido y el mexicano Luis David Adame al término del tercer festejo de la Feria de San Mateo de Logroño, una tarde a medias de todo.

FICHA DEL FESTEJO.- Seis toros de Juan Pedro Domecq, correctos de presentación, salvo el anovillado quinto, nobles y justos de fuerzas en general, a excepción del cuarto, que ha tenido más clase y motor. Precisamente el quinto, sin raza e inválido, fue también el más deslucido.

Enrique Ponce, de grana y oro: estocada ligeramente desprendida (palmas); y bajonazo (oreja).

José Garrido, de catafalco y oro: estocada (oreja); y pinchazo, otro hondo y tres descabellos (silencio).

Luis David Adame, de rosa pálido y oro: gran estocada (oreja); y media (silencio).

En cuadrillas, buenos pares de Miguel Martín al tercero.

Al finalizar el paseíllo se guardó un emotivo y respetuoso minuto de silencio en memoria de las víctimas del terremoto de México.

La plaza registró media entrada en los tendidos.

A MEDIAS DE TODO

Ponce no pasó de aseado con un primero de corrida tan noble como flojo y bajo de raza, el típico «juampedro» chochón y insulso al que el valenciano sobó y sobó por los dos pitones, con poco ajuste y haciendo el toreo a media altura, en lo que una faena correcta teniendo en cuenta la condición de su oponente, pero también plana y sin emoción. Hubo algunas palmas de consolación tras el arrastre.

El cuarto fue, hasta ese momento, el toro de más movilidad, con más pies y clase, del envío, al que dieron bien en varas el caballo. Ponce estuvo sensacional con él. Un inicio en los medios muy rotundo y con mucho temple fue la antesala a una labor muy plástica y perfectamente conjuntada sobre la diestra.

Manejó también muy bien la escena el valenciano, que acabó de encandilar a los asistentes con un fin de obra «marca de la casa», en la que no faltaron pases genuflexos, cambios de manos, circulares invertidos… Ambiente de frenesí. Pero se le fue la espada muy abajo, lo que desmereció una buena obra de Ponce, aunque fuera premiada igualmente con un trofeo.

Garrido, que había entrado a última hora en el cartel en sustitución de su paisano extremeño Antonio Ferrera, rayó a muy buen nivel con su noble y enclasado primero, al que cuajó una faena de mucho temple y gusto, de mano baja y ligazón por los dos pitones.

Toreo rotundo y mandón ante un toro que respondió a tanta exigencia de Garrido, que lo bordó sobremanera en dos series al natural ya en el epílogo, para acabar por ceñidas manoletinas. La estocada, de la que salió el toro sin puntilla, fue perfecto corolario a una labor premiada con una oreja de ley.

El quinto fue el garbanzo negro del envío tanto por presencia (demasiado anovillado) como por esencia, pues ni tuvo raza ni fuerzas para poder desplazarse mínimamente. Con semejante «material», la gente se puso rápido a la contra, e, incluso, invitaron a Garrido a que desistiera con aquel sinsentido.

Luis David Adame cortó una «orejita» de su primero, premio condicionado sobremanera por la gran estocada que recetó, de la que, además, salió trompicado el mexicano.

Por lo demás, Adame anduvo animoso con el capote y, aunque el inicio de rodillas con la muleta fue prometedor, sin embargo, pecó luego de demasiado encimista, sin dejar desarrollar al toro, al que acabó «ahogando». Pero un final galerista, muy del agrado de la gente, y el fulminante espadazo posterior, voltereta incluida, fueron claves para la concesión de un amable trofeo.

El sexto fue el toro de más peso y cuajo de los seis. Adame, que lució en un quite por zapopinas y banderilleó también con soltura y facultades, sin embargo, se perdió en la muleta en un eléctrico trasteo de muchos pases y poco poso.

Está aún muy nuevo este joven mexicano, al que le sobra valor para dar y tomar, pero le falta todavía profundizar en lo fundamental.

Agencia EFE

A oreja por coleta en la tercera de feria en Logroño Leer más »

Garrido por Ferrera en Logroño

Sustitución de Antonio Ferrera en la feria de San Mateo 2017 de Logroño

Ante la baja por enfermedad sufrida por el matador de toros ANTONIO FERRERA, que le impide actuar en la corrida de toros anunciada, en esta plaza, el próximo día 20 de septiembre, será sustituido por él, también, matador de toros JOSÉ GARRIDO, quedando, por tanto, el cartel compuesto por:

Toros de JUAN PEDRO DOMECQ para ENRIQUE PONCE, JOSÉ GARRIDO y LUIS DAVID ADAME

Garrido por Ferrera en Logroño Leer más »

Dos orejas Talavante y una Roca Rey con insulsos «jandillas» en Logroño

Dos orejas ha cortado hoy el torero Alejandro Talavante a una noble y facilona corrida de Jandilla, segunda de la Feria de San Mateo de Logroño, y en la que el peruano Andrés Roca Rey también ha sumado un apéndice, este de tintes más amables.

FICHA DEL FESTEJO.- Dos toros, reglamentariamente despuntados para rejones, de los herederos de Ángel Sánchez y Sánchez (primero y cuarto), noble y a menos, el primero; y manso y huido, el cuarto. Y cuatro en lidia ordinaria de Jandilla, nobles y manejables, segundo y quinto; flojo e insulso, el noblote tercero; y con tendencia a buscar la huida, el sexto.

El rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza: rejón trasero (silencio); y rejón con derrame (silencio)

Alejandro Talavante, de azul pavo y oro: estocada (oreja con fuerte petición de la segunda, y bronca al palco por no concederla); y estocada trasera y tendida, y descabello (oreja).

Andrés Roca Rey, de verde oliva y oro: estocada ligeramente desprendida (palmas); y estocada (oreja).

La plaza registró cerca de tres cuartos de entrada en los tendidos.

DE LA FRIALDAD A LA GENEROSIDAD

El primero de Talavante fue un toro noble y que sirvió mucho para el lucimiento del extremeño, que cuajó una faena con dos partes bien diferenciadas con un detonante inesperado.

Inicio a pies juntos y primeras tandas a derechas con desmayo, los hombros caídos, mentón hundido en el pecho y torería en los embroques. Pero los tendidos todavía no acababan de despegar, aunque hubo un conato tras una tanda sublime al natural.

Pero lo que realmente hizo despertar a la gente fue el intento de un espontáneo -aparentemente antitaurino- de saltar al ruedo, que no llegó a hacerlo, precisamente, porque los propios aficionados se lo impidieron. Eso los hizo espabilar hasta jalear las siguientes tandas a izquierdas de Talavante casi con pasión desbordada.

Le pidieron las dos orejas tras una buena estocada, mas el usía dejó el premio en singular. La bronca que se llevó, de campeonato.

Otra oreja cortó Talavante del quinto, un toro noble y muy dócil, que, precisamente por esa falta de chispa, de casta, pareció poco enemigo para el extremeño, que alternó uno y otro pitón con un toreo de mucha naturalidad, cadencia y armonía. Como en su primero, una serie al natural casi ya en las postrimerías fue lo más rotundo.

Al finalizar la tarde se marchó ovacionado por su propio pie, al tiempo que la empresa confirmaba que la baja de mañana de Antonio Ferrera será ocupada por su paisano extremeño José Garrido.

Roca Rey sorteó un primero noblote y con fijeza, pero que apenas transmitía por su falta de fuerzas. El peruano diseñó una labor tan correcta como larga, ligando bien por los dos pitones, pero sin que aquello acabara de romper por lo poco que aportó el «jandilla».

El sexto fue noble aunque con una marcada tendencia a buscar la huida a la más mínima. Faena bullidora de Roca Rey, de más «efectos especiales» que de toreo fundamental. El caso es que a la gente le gustó, por eso, tras una certera estocada, le acabaron premiando con una amable orejita.

Abrió función el rejoneador Hermoso de Mendoza, que llevó a cabo una faena muy pulcra y técnicamente perfecta a su noble primero, aunque la gente de este tipo de espectáculos mixtos, demasiado fría con los jinetes, nunca llegó a pronunciarse durante la lidia.

Obviaron el templadísimo recibo y los galopes con «Barrabás»; el poder a lomos de «Berlín» en banderillas; y la torería sobre «Brindis», de frente en los cites y pegando auténticos «trincherazos» antes de clavar. Dos cortas sobre «Ignorado» y un rejón al primer envite no fueron suficiente para un graderío que ni siquiera le sacó a saludar.

El cuarto fue toro manso y huidizo, que se defendió con genio y con arreones. Digna actuación de Hermoso, que arriesgó mucho por agradar, sobre todo con «Disparate» y «Donatelli», con los que clavó banderillas de mucho mérito. Otra vez, apenas le tuvieron en cuenta.

Agencia EFE

Dos orejas Talavante y una Roca Rey con insulsos «jandillas» en Logroño Leer más »

Valadez y un gran «Palomo» abren a lo grande la feria de Logroño

El novillero mexicano Leo Valadez ha cortado hoy las dos orejas de un gran novillo de La Quinta, de nombre «Palomo», premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre, en lo que ha sido el pasaje más rotundo de una interesante apertura de la Feria de San Mateo de Logroño.

FICHA DEL FESTEJO.- Novillos de La Quinta, bien presentados y de interesante juego en conjunto. Destacaron, primero y, sobre todo, cuarto, de nombre «Palomo», número 106, cárdeno oscuro y de 482 kilos, premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre. A menos, el segundo; sin empuje el tercero; cambiante el quinto; y

Leo Valadez, de grana y oro: estocada fulminante (vuelta al ruedo); y estocada (dos orejas).

Alfonso Cadaval, de rioja y oro: estocada contraria (vuelta al ruedo); y estocada trasera y tendida (oreja).

Antonio Catalán «Toñete», de azul pavo y oro: (oreja); y casi entera (oreja); y pinchazo, casi entera y tres descabellos (silencio tras aviso).

En cuadrillas, buenos pares de Raúl Adrada al tercero, aún sin saludar, Manuel Jesús Bernal destacó picando en el cuarto.

La plaza registró menos de un cuarto de entrada en los tendidos.

INTERESANTE PISTOLETAZO

Leo Valadez sorteó en primer lugar un novillo noble y encastado, con prontitud, fijeza y humillación. El mexicano, que había brillado en el saludo a la verónica, sin embargo, no se acopló en la muleta. Ni por el izquierdo, que fue el pitón bueno, logró Valadez más que algunos naturales dispersos de buen trazo dentro de un conjunto intermitente y sin unidad.

El sobrecogimiento de una voltereta al enterrar la espada, que tiró al utrero sin puntilla, animó al respetable a darle una ovación, que acabó finalmente en una vuelta al ruedo.

En el cuarto, en cambio, sí rayó a muy buen nivel Valadez frente a un utrero de bandera: pronto, con calidad y encastado, de emotivas y vibrantes embestidas. El mexicano volvió a brillar con el percal, sobre todo en un vistoso quite por zapopinas.

De rodillas y en la misma boca de riego inició el azteca una faena muy compacta y maciza, basada en el temple, la limpieza, el hilván y el trazo largo de cada muletazo. La gente disfrutó de la comunión entre «Palomo» y Valadez, que recetó dos series extraordinarias al natural para acabar metiéndose en la distancia corta, donde se desenvolvió como pez en el agua.

Entró la espada a la primera y para él fueron las dos orejas, que paseó tras la vuelta al ruedo al bravo «Palomo».

El primero de Cadaval fue de más a menos. De inicio tuvo un comportamiento prometedor, lo que permitió al sevillano exhibir un buen corte en el prólogo de una labor que, sin embargo, no llegó a despegar, ora porque el novillo se paró pronto, otra también porque faltó algo en el momento clave por parte del novillero, que manejó con acierto la tizona. Dio una vuelta al ruedo.

El quinto fue un novillo cambiante, que salió manseando, buscando los espacios y sin dejarse picar. Cadaval anduvo con oficio en una labor en la que el utrero «rompió» a bueno en la muleta, moviéndose con mucha transmisión. El sevillano rayó a buen nivel con él, dominándolo sobre ambas manos. Todo lo que hizo tuvo mucha importancia, por eso la oreja que cortó fue de las de ley.

Toñete se las vio en primer lugar con un novillo muy noble pero al que le costaba un mundo desplazase. Quizás tuvo que ver el excesivo castigo que llevó en el caballo. El madrileño anduvo muy dispuesto, demostrando también buenas maneras y que tiene valor a lo largo de una faena que, en el debe, pecó de encimista. Manejó con acierto la espada y para él el reseñado trofeo.

El sexto fue posiblemente el novillo más noble del envío, y con él se vio a un Toñete en las antípodas de su actuación anterior. Esta vez pecó de frío en una labor intermitente en la que faltó pulso y, en consecuencia, limpieza en los muletazos.

Agencia EFE

Valadez y un gran «Palomo» abren a lo grande la feria de Logroño Leer más »

Logroño ya tiene carteles para su San Mateo

La Casa Chopera a presentado la feria taurina de San Mateo 2017

Esta mañana se han hecho públicos los Carteles Oficiales de la próxima Feria Taurina de San Mateo 2017 que tendrán lugar entre los días 17 y 23 de septiembre en la Plaza de Toros de La Ribera de Logroño. El ciclo mateo contará con cinco corridas de toros, una de ellas mixta, una novillada con picadores, la semifinal del campeonato de recortadores de España y seis mañanas de vaquillas y festejos populares.

Las combinaciones son las siguientes:

Domingo 17 de Septiembre Semifinal del campeonato de España con toros “Toropasion”

Lunes 18 de Septiembre – Novillada Picada 6 Novillos 6 de La Quinta para Leo Valadez, Alfonso Cadaval y Toñete

Martes 19 de Septiembre – Corrida de Toros Mixta 2 Toros para rejones de Sánchez y Sánchez y 4 Toros de Jandilla para Pablo Hermoso de Mendoza, Alejandro Talavante y Andrés Roca Rey

Miércoles 20 de Septiembre – Corrida de Toros 6 Toros 6 de Zalduendo para Joselito Adame, Juan Del Álamo y Ginés Marín

Jueves 21 de Septiembre – Corrida de Toros 6 Toros 6 de El Pilar para Diego Urdiales, José María Manzanares y Cayetano

Viernes 22 de Septiembre – Corrida de Toros 6 Toros 6 de Juan Pedro Domecq para Enrique Ponce, Morante de la Puebla y Luis David Adame

Sábado 23 de Septiembre – Corrida de Toros 6 Toros 6 de Victorino Martín para Curro Díaz, Juan Bautista y Román

Logroño ya tiene carteles para su San Mateo Leer más »

Scroll al inicio