La terna no pasa de la ovación en La Maestranza

Compártelo...!

La décima del abono sevillano no registró triunfos a pesar de haber toros con posibilidades y faenas interesantes. El acero dejó sin premio labores como la de El Cid al segundo de su lote o la de David Mora a su primero. Solo hubo ovaciones para la terna en una corrida de Daniel Ruiz en la que hubo de todo, pero también algunos toros de nota.

 Se lidiaron toros de Daniel Ruiz, bien presentados y de juego variado. Destacaron segundo y cuarto.

Manuel Jesús ‘El Cid’, silencio y leve división al saludar.

David Mora, ovación y silencio.

Daniel Luque, ovación y ovación tras aviso.

Menos de media plaza en tarde ventosa y fresca. Saludaron en banderillas Ángel Otero, José María Tejero, Abraham Neiro y José Luis Neiro.

CRÓNICA:

La terna se fue de vacío en una tarde que tuvo algunos toros interesantes de Daniel Ruiz. Las faenas de El Cid al cuarto, David Mora al segundo y Daniel Luque al sexto fueron lo más destacado de un festejo que no acabó de somper.

El Cid fue muy molestado por el viento en el recibo de capa al primero de la tarde. El toro se enceló en el peto en el primer puyazo y llegó a la muleta rajadito. El Cid le dio una primera serie con algún muletazo de buen trazo. Hubo una más por ese lado y cambió a la zurda, siendo molestado de nuevo por el viento. A la siguiente tanda el toro se rajó y buscó el amparo de las tablas y la faena tuvo que concluir. Mató de media y dos descabellos. Silencio.

Muy serio fue el cuarto, que desarmó a El Cid a las primeras de cambio en el recibo y no humilló. Brindó al público y ligó con emoción en la primera serie y también en la segunda, haciendo sonar la música. En la tercera bajó la mano y remató muy bien de pecho. Hubo una más por ese pitón antes de torear con la zurda. En ese momento se rajó el toro. El torero apuró las últimas arrancadas junto a las tablas e hizo guardia con la primera estocada. Hubo un pinchazo más y una estocada efectiva. Leve división al saludar.

David Mora se lució en el recibo de capa a la verónica y en la buena media con la que cerró. Daniel Luque hizo un quite por chicuelinas ajustadas cerrado con media. Comenzó de rodillas la faena de muleta y ligó una serie con la derecha que levantó los primeros oles en el tendido. La segunda fue ligada, respondiendo bien el de Daniel Ruiz. Al natural subió la calidad de la faena y comenzó a sonar la música. En la siguiente tanda el toro se quedó más corto pero hubo compostura en el toreo de Mora. Pudo haber triunfo pero pinchó antes de dejar una estocada y necesitar un descabello. Ovación.

No hubo lucimiento de capa de Mora en el quinto. Comenzó la faena doblándose y dio una primera serie que no llegó al tendido. No logró remontar la intensidad de la faena con un toro cada vez más parado y soso. Dos pinchazos y estocada. Silencio.

Luque se lució con el capote en el quite que le hizo al tercero después de recibir el toro los dos puyazos. Toreó bien a la verónica y cerró con dos medias. El sevillano templó y compuso bien en la primera serie diestra. En la segunda le molestó el aire y el toro perdió algo de fuelle. Cuando toreó con la zurda el de Daniel Ruiz ya estaba apagado y embestía con sosería. El final, quedándose muy cerca del toro, despertó al tendido y concluyó con un bonito toreo a dos manos. Mató de estocada y fue ovacionado.

El sexto se revolvió en el capote de Luque, que dio buena media. En banderillas el toro dio un susto al banderillero Neiro, desestabilizándolo en uno de los pares. Luque comenzó la faena con muletazos por alto sin moverse. Cuando toreó en redondo con la derecha el toro protestó. El de Gerena insistió y sacó todo lo que tuvo este último toro. Fue una labor de entrega y valor que fue reconocida por el público. Terminó con un serio arrimón metido literalmente entre los astifinos pitones del toro. Dos pinchazos y estocada. Ovación tras aviso.

Scroll al inicio