Matinal de sol para un cartel de lujo. Los maestros Enrique Ponce, Antonio Ferrera y Andrés Roca Rey con ganadería de Victoriano del Río.
Los tres toreros son sacados a saludar a los medios al ruedo. Ponce de Grana y Oro, Ferrera de Fucsia y Roca Rey de purísima y oro.
Primer toro en el ruedo, Breviato. Colorao de Victoriano del Río. Sale poderoso por el chiquero y vibra el albero ante la energía del astado donde lo espera el maestro Enrique Ponce. Capote de derecha a izquierda, enarbolando los bellos colores de nuestra cultura. Ponce abaniquea un buen toro a placer ante un tendido entregado arrancando «olés» y aplausos por cada lance. Ese tan suyo, que no le queda a nadie más. Desde que cita por la espalda, con las piernas flexionadas, se mece el cabello y el bello de las cejas, hasta que se envuelve con el toro en momentos que levanta a los espectadores de sus asientos. Toro bravío a la salida, de más a menos pero siempre en la línea Enrique. Muerte de estocada y una oreja de premio. Olé, maestro.
Segundo toro para Antonio Ferrera. Castaño Claro, bien proporcionado el astado, de bonito porte. Bravío, es todo coraje contra las tablas. El Balear inicia la suerte de capotazos embelesando con cada pase y arrimada al toro. Se cubre la camisa con la vida del toro, al baile de unas banderillas. Sencillo y natural su faena, variada para gustazo del personal. Buenos remates en pases de pecho. Increíble!!!! Muy buen capote. Mata de estocada y descabello y arranca a la presidencia dos soberanas orejas.
A ratos el sol da tregua a los paisanos en la plaza de Olivenza. Andrés Roca Rey espera a Jara en el albero para las delicias de los aficionados. 541 kilos y negro listón el del Palomar de la misma ganadería de Victoriano del Rio. Faena vistosa del maestro que comienza con chicuelinas y tafalleras y con la izquierda. Matinal de ardor el que estamos viviendo en Olivenza. Maravilloso, pega arrimones a placer, torero valiente y siempre cerca de los pitones. Estaconazo hasta la bola y de trofeo una incomprensible oreja. Miramos a la presidencia de reojo y con cara de malos amigos.
Segundo para Ponce, Maestro de salón, fino y elegante, llena de aplausos la plaza. Drosero, negro bragado, inválido para la faena que el maestro es capaz de ofrecer. Pitos y bronca para la presidencia que hace oídos sordos. Ponce haciendo lo imposible con un toro inservible. A pases magistrales, levantando el astado a cada pase y a cada capotazo, a cada roce con el cuerpo del animal y enfervorizando a los aficionados que siguen la faena de pie. Todo un maestro en Olivenza. Corta dos orejas y saldrá por la puerta grande.
Quinto toro de Victoriano del Rey para Jose Antonio Ferrera. Decorado, colorao de una bonita estampa. Se esmera el de Villafranco en una preciosa faena sin banderillas. Gusta su arte con el capote por fino y acertado y levanta suspiros al tendido. Baila por el centro de la plaza y capotea hasta llegar al unísono con el toro. Faena variada como nos viene ofreciendo, siendo esto sello propio del matador. Gran estocada y oreja de trofeo. Grande Ferrera.
Limeño, de estirpe de toreros. Roca Rey torea el sexto de la tarde en busca de buen espectáculo bajo la mirada atenta de su siempre padrino, el maestro Enrique Ponce. «El niño» remira con suerte a un toro que debajo de la incipiente lluvia se ve de perfecta sombra y astados bien puestos desde la puerta de chiqueros, rodilla en tierra. Vuela el capote por encima de la cabeza y el toro queda colocado para su próximo embiste. Andrés capotea a Descreído, negro y bravo para lucir en fiesta. Gusta el arte de este torero y así aplaude la plaza todos sus pases. Muy buena faena que desluce un pinchazo. Estocada y vuelta a la plaza con oreja en mano.